Hemos entrado en la era de la «conveniencia». Mientras hace unos años, las empresas buscaban diferenciarse por atributos, y el directorio, de la empresa en conjunto con sus asesores de imagen, los publicistas y hasta grupos de clientes intentaban definir el “alma “ de la empresa; hoy los ejecutivos se reúnen para buscar formas de bajar los precios.

Los atributos quedaron muy atrás. Estamos en el reinado de la conveniencia. Y para formar parte del bochinche comercial que se ha generado alrededor del precio, hay que tener dinero plástico en la mano. O sea: tarjetas de crédito.

Es bien sabido que con una determinada tarjeta se puede acceder determinado descuento, determinado día de la semana, y con otra, a otros beneficios.

Ello lleva a que muchas personas tengan más de una tarjeta de crédito para lograr los beneficios. De esa manera, se promueve el uso del crédito, y se genera movimiento en la parte comercial. Un movimiento comercial que tiene un costo, para el comerciante y para el emisor. Pero también se promueve el endeudamiento, y la cadena de endeudamiento que puede llevar a que las personas sin darse demasiado cuenta, terminen comprando más de lo que pueden pagar; y por lo tanto se endeuden más con otras formas de financiación. Pero en el medio de toda esta situación, en la que poco se puede hacer, salvo reflexionar, porque cada quién tiene que hacerse responsable de sus decisiones; está el producto:

¿Cuál es el valor de determinado producto sin promociones, descuentos o beneficios? Realmente es una oportunidad, una atención que tienen hacia mí o se trata de que ya de por sí, antes de que salga el producto al mercado, se ha buscado mermar la promoción de descuento. La realidad, es que hoy cuesta saber cuál es el precio del producto. Pero existe una salvedad: “¡Utilizaré el descuento! Pero en lo que es credibilidad, solamente confío en aquellos negocios que hace tiempo trabajaron el posicionamiento en mi mente por atributos.”

Precisamente es esa identidad, esa diferenciación hay que ganársela, para “mostrarse” diferente en este carnaval de precios.