Para aquellos que llevan el rugby en las venas no hay nada mejor que saltarse un par de días de playa en Punta del Este para ir al Campus de Maldonado y ver rugby del mejor. Y para aquellos que no llevan el rugby en las venas…¡también!
Es que el Seven A Side nos llega a todos, nos guste mucho, poco o nada. Oímos hablar de él permanentemente. Las radios lo anuncian, los diarios lo cubren, la gente lo comenta. El Seven, tras más de 25 años existiendo, está ahí, a la vuelta de la esquina, agazapado, pronto para salir a la luz tras un año de ausencia, y volver a deslumbrarnos como lo ha sabido hacer en pasadas ediciones durante 27 años.
No estarán las selecciones del mundo, es cierto, pero se harán presentes los mejores clubes argentinos, además de los nuestros por supuesto. Será un Seven regional, de entre casa, como aquel que se realizó por primera vez en el año 89 y consagró campeón a Old Boys tras la final ante Banco Nación. Un Seven que retoma los orígenes. No importan las razones, si es por falta de dinero, falta de apoyo, la crisis o lo que sea. Lo importante es que el Seven A Side, una de las tradiciones más atractivas de nuestro país, vuelve con todo, pisando fuerte y haciéndose sentir. Seguro el nivel de juego se hará mucho más competitivo que en años anteriores, y para los clubes uruguayos los partidos serán un duro reto. Los equipos se estan preparando con una gran concentración a expensas de saber la importancia de tal evento de ruby seven.
Los equipos argentinos siguen confirmando su presencia: S.I.C, Casa de Pádua, Taraguí, Casapueblo, La Tablada y Alumni estarán paseando su juego exquisito por el verde gramilla del Campus. De Brasil viene el club San José, de San Pablo y aún restan confirmar algunos clubes chilenos, tal vez alguno paraguayo. Se comenta que puede haber sorpresas. Los nuestros estarán todos: Carrasco Polo, Old Christian, Old Boys, Old British, Pucarú, Los Lobos, Champagnat, Cuervos, Trébol y Montevideo Cricket.
Se habilitarán las tribunas Norte y Sur y las entradas son populares. Pagando una se entra el sábado 4 y el domingo 5 se va gratis.
Sentarse en la tribuna, tardecita-noche calurosa, ver algunas chicas lindas pasar y no necesariamente promotoras, tomarse una cerveza bien fría, comerse un par de hamburguesas, ver partidos de primerísimo nivel, algún que otro choque clásico, admirarse con jugadas de alto vuelo, y el domingo 5 la fiesta de despedida; un sinfín de ingredientes que hacen del Seven de Punta del Este un evento tan particular, tanto dentro como fuera de la cancha y es admirado en tantas partes del mundo.
Realmente…¡Qué alegría! ¡Vuelve el Seven!